Libro: Recursos Humanos

de Antonio Gracia Ángel

El estilo del autor no se pierde en la extensa obra de 345 páginas que ha publicado, y que de manera maestra sigue una secuencia lógica que empieza en tercera persona y se explaya en una narración básicamente entretenida y amena.

Antonio Gracia Ángel fue seleccionado por la Rolex Mentor and Protégé Arts Initiative para escribir esta novela con la tutoría de Mario Vargas Llosa. Crédito que no solo lo consagra como un aventurado y sagas escritor, sino como una prueba de sus prosperas publicaciones, Su casa es mi casa (Planeta 2001) ¡Aaaaaahhh…! Doce relatos eróticos (Planeta 2002).

Recursos Humanos es una novela rebosante de humor, sarcasmo, miedos, sueños y culpas. Todo ello y más, vivido por Ricardo Osorio, el jefe del área de Recursos Humanos, el protagonista de toda la historia, la cual se desarrolla en su mayor parte en una fabrica de mermeladas que en el trayecto es implementada otra de detergente. No solo Osorio es participe de esta magna obra, su esposa, Ángela, su amante; Elsy, su secretaria y demás personajes que matizan he intrincan los pasajes de este ajetreado jefe de Recursos Humanos.

La secuencia de relatos fluye de capitulo en capitulo, unos desarrollados por su esposa, narración en segunda persona que es una suerte de rutinaria, retahíla de conversaciones al vació.

“A las ocho de la mañana, María Teresa había relevado al insomnio en la misión de mantenerlo despierto. Abrió las cortinas, encendió el equipote sonido, concertó por teléfono una cita para almorzar en casa de sus padres. Si se hubiera precipitado el Armagedón antes del mediodía, Osorio habría recibido al Anticristo con los brazos abiertos, agradecido por haberle evitado el encuentro con sus suegros. Pero no sucedió”.

Con Disimulo y bellaquería, las narraciones entretienen y hacen fluir la lógica satírica de la vida contada bajo la pluma de Antonio Gracia Ángel. Básicamente un humos negro y elegante a la vez que se inmiscuye en la vida de un inocente trabajador de oficina, la cual es sometida al escrutinio del lector, teniendo al narrador como fiel cómplice de la vida ya ausculta.

José Luis Díaz